lunes, 13 de febrero de 2012

Dígaselo cantando

Lo que va a ser narrado a continuación, ocurrió en la realidad, como los apagones de luz o las subidas de iva indiscriminadas. Ocurrió, con todas sus letras y decibelios.
Habíamos quedado para cenar en un lugar aparentemente tranquilo, lleno de tofu, quesos biológicos y verduras cuidadas con las manos amigables del hombre, cuando, a 38 centímetros, allí los vimos. Estaban todos sentados, como una fiesta de momias egipcias actualizada, cuidadosamente sentados, sin armar demasiado escándalo.
Cada mesa despachó su comida entre chin chins y conversaciones intrascendentes. Hasta que llegó el postre. Ahí se armó la performance. Voy a recordar las inclemencias invernales de aquella noche: estábamos a 2 grados y yo iba vestida de esquiadora. En algunas partes de Barcelona incluso cayó aguanieve.
A 38 centímetros, dos emuladoras de Victoria Beckham, con gran alboroto y vestidos palabra de honor, le cantaron a un tal Xavi, de la mesa de al lado, el Happy birthday a lo Marylin Monroe de Sabadell y le y se llenaron la cara de nata con un bote de spray debidamente vaciado con gran estruendo.
Aquello era el delirio. Todos haciendo fotos, y ellas paseándose en cueros con la cara untada de blanco. No sabía si reír o llorar. Lo que está claro es que la gente se divierte como puede o sabe, y bueno, mejor que hagan estos numeritos de dudosa calidad artística, antes que atracar bancos. Bueno, pensándolo mejor, quizás sería mejor que lo hicieran, vestidas como cabareteras y armadas con sprays llenos de nata. Eso me gusta más.

4 comentarios:

Testigo Nº 2 dijo...

Charlie, Charlie...!!!! PAYASAS!!!

Pink pony dijo...

Salir de noche, es lo que tiene CHARLIEEEEE!!

enerby dijo...

Seria nata ecologica no?

pink pony dijo...

nor. Sería esa llena de gases como los que llevan las neveras por dentro. Eso que no quieres inhalar, vamos :)