viernes, 12 de noviembre de 2010

Remando al sol

No estoy en Waikiki de orgía, no. Todavía no. Estoy aquí multitasking como una lerda, con taquicardias y todo e ingestiones masivas de café. En fin, la vida moderna y las ganas de prosperar están sembradas de tareas y nervios. Pero bueno, yo y mi café (el segundo), hemos decidido que no vamos a ponernos nerviosos. Que si tenemos que acabar en el puerto de estibadores, nos tatuaremos un corazón en el brazo del tamaño de un pino y c'est la vie mon petit.
Por el resto bien, fui mediática por un día. Pasaron mi docu de hierbas y pastores por la tele y lo vi con mi santa madre y su amiga, que parecía que no callaba ni debajo del agua y yo le dije que estábamos en el cine y no se podía hablar. Es que estas mujeres no entienden que interrumpir todo el tiempo es lo peor, pero bueno, no fueron a la escuela el día que tocaba Cómo ver un programa de tele y estar callado. Espero que lo aprendan en recuperación.
Y con esto y un bizcocho sigo tecleando ingente información que irá vete tú a saber donde. Y proclamo mi amor por el sushi y los hombres y mujeres con corazón. Por cierto, lo de 0 comments empieza a ser francamente preocupante.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hoy yo pongo el sushi...tu el corazon?

el de los manteles...

pink pony dijo...

Siempre hay sushi y corazón para ti, querido :)