martes, 6 de julio de 2010

Dicen que la culpa es nuestra

Tal cual. Ayer, mientras calentaba silla con la editora y cortábamos y pegábamos por aquí y por allí salió la conversación. ¿Por qué las mujeres estamos en una posición de segunda regional? ¿Por qué mucho tío incompetente pero con el lema Yo la tengo más grande tatuado en la frente tiene cargos de poder y responsabilidad? Yo sé que la opción inteligente es dejar pasar a la borregada y nosotras haremos nuestra misión a la sombra de un buen árbol. Pero las cosas están mal repartidas. Y lo de que se asocie todavía embarazo a grano social en el culo me parece escandaloso.
La puntilla al asunto vino cuando la super editora me lo soltó a bocajarro: La culpa es nuestra, porque elegimos o a niñatos o a impresentables niños malotes que no saben hacer ni la o con el canuto. Esos son los que han de acompañarnos por la vida. ¿Te imaginas al último lerdo que conociste haciendo un gazpacho? Yo no.
¿A caso este juego infinito del pilla pilla está diseñado para que no nos aburramos en esta vida? Porque si por programación lo de las parejas fuera más "fácil" seguramente cada uno de nosotros tendría 83 maridos y mujeres, básicamente por aburrimiento. Ahí queda eso, que cada uno se lo piense mientras se ducha por 3 vez. Tengo una araña que recorre mi pantalla a alta velocidad. ¿Tiene quizás un mensaje para mí? mmm

2 comentarios:

Anónimo dijo...

tu editora sabe la mar, pero olvida que tenemos algo entre las piernas que pide guerra de vez en vez y que el señor rosa no basta, que muchas veces quiere the real thing. yo creo que el secreto está en hacer el acto y después plantarle todo el hortalizamen al señor a ver si supera la prueba o lo envías a casa con un pan bajo el brazo.

yo nunca he defendido el gazpacho alvalle (ni el hacendado, todo sea dicho), pero a lo mejor lo inventó un hombre al ver que peligraban sus posibilidades de casarse...

pink pony dijo...

Ya sabes que yo vivo casi constantemente en una tienda de ultramarinos, en fin...De momento el kit lujuria anda aparcado. Ya te contaré si remontamos...