miércoles, 22 de septiembre de 2010

Días postmodernos

Después de tomarme la lluvia con alegría, como un elemento reparador y liberador, me subí a la bicicleta, cual réplica de ET con mi poncho y mi bolsa de tigre. Supongo que la escena era de lo más alienante: una mujer empapada sonríe y pedalea (tengo que decir que un hombre chorreante sobre dos ruedas me sonrió: es la solidaridad de los neohippies). Y llegué a mi sesión de reparación corporal: yoga. No sé si ayuda o no, pero sientes como que domesticas a la taquicardia y el mundo no es un lugar tan agreste. Hasta crecen pequeñas flores de amor por las esquinas.
Después de calentar silla, cerebro y vocación me fui a mi casa. Por el camino me acordé que había perdido un pink tanga, el uniforme habitual de pink pony, y me fui a la mercería de abajo a buscarlo. Cuál no fue mi sorpresa al escuchar a la sheriff del barrio, o sea, la directora de la mercería, si me quería despedir de sus tortugas de tierra. Yo pense que las iba a vender por Ebay, por eso de redondear sueldos, y no, me dijo que se las llevaba a otros lares. Y entonces, mi última obsesión retratadora dijo: aquí tenemos una bonita historia. La mercera liberó a las tortugas por la tienda y yo las fui grabando. Incluso las dejó caminar por la acera, y los niños se paraban y tenían visiones del Arca de Noé y yo avanzaba de cuclillas grabando patas de tortuga.
Todo esto es real y sin ácidos. Tiene mérito.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

a saber qué es lo que estaría haciendo pink pony para perder un pink tanga... en mi pueblo una no pierde el tanga mientras pasa el mocho o prepara unos biquinis.

http://www.youtube.com/watch?v=P6zcry-jgoA

pink pony dijo...

Te voy a dar Cecilio, está claro que hago lo que me viene en gana, eso sí...Estaba en Babia colgando la ropa, y toma tanga voladora!

Anónimo dijo...

una en mi pueblo se quedó embarazada de un golpe de viento así... cuidadín!

pink pony dijo...

sí, y ahora se lleva la polinización por internet. NOO!