viernes, 18 de julio de 2008

Cómo amordazar al enano cabrón

No son todo nubes de color rosáceo y atardeceres al ritmo de Cesarea Evora. También convivimos con nuestros demonios y fantasmas, con la quimera de tres cabezas y pezuñas de toro. Viven escondidos en alguna zona del esternón, que es donde suele doler cuando uno está triste o contrariado. No es un dolor en sí, es una molestia, es un golpe de cola de dragón que retumba por las cavidades pulmonares. Te ahoga momentáneamente, te paraliza, te recubre con una leve capa de bava llena de preguntas y dudas, te abraza jugando a ahogarte un poco. A ver si aguantas el embate. Hay dos opciones, sucumbir al ataque y darse cuenta que uno es un guisante cósmico perdido en una inmensa ensaladilla rusa con visos de intoxicarse de mayonesa o bien decir: a tomar viento. Las pezuñas, los grifos, la melancolía que los parió a todos juntos, os vais de vacaciones a un resort tipo Marina d'Or y os olvidáis de mí. Que tengo trabajo, que no quiero nadar en mi lagrimal, que quiero vivir tranquila. En fin, acabo de maniatar al enano cabrón que me estaba llevando hacia un descampado lleno de nubarrones negros. Le he tirado spray de auto-defensa de pimienta y le he dicho que tengo que entregar unas cosas. El tío se estaba resistiendo, pero le he dicho que como no me dejase en paz, en la próxima vez se convertiría en el pianista de Parada. Ha prometido no volver a molestarme.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

vi tus mensajes late at night y se me rompio el corazoncito. estaba lejos del ordenador leyendo, y me habia dejado los auriculares puestos, con lo que no sonaban las llamadas. hoy teneis mini-saradin, no???

Love,
I.

Pink pony dijo...

eres un infausto internauta! Parece que vamos a las golondrinas tonight, como tengamos show tipo lago de Banyoles....Ya te contaré. Hazme el favor de conectarte al Skype. Need to update! besos grandes C.