martes, 22 de julio de 2008

Estar solo es la verdad

21.52, llamada perdida del niño de los manteles. Estoy en la otra punta técnica de la ciudad, pero qué coño, toda la energía que no aparece por la mañana lunera, brota milagrosamente acompañada por el vino blanco cuando cae la noche. Rrrrum. Llego a mi barrio y los encuentro. Y empieza la charla. Primero, las radiografías externas de todo culo viviente vestido de verano. Observamos cómo el deseo masculino es visiblemente superior. Lo de los paquetes, así de entrada, mientras me tomo una birra me desconcentra. A parte que creo firmemente que el encanto reside en descubrir y destapar capas. No en escanear hasta la médula ósea. Odio estas revisiones técnicas donde sólo hace falta que te pongan un sello en la frente, apto o 100% vacuno. Yo no sé si es cultural o básicamente que el verano altera todos los mecanismos de auto-control existentes. Seguimos sacando temas de actualidad como lo efímero del amor, la lotería de las relaciones o para qué sirve levantarse cada mañana. Llegamos a la conclusión que es mejor sufrir a los 30 que a los 50 y que estando uno sólo es la hora de la verdad. Que ya no es fulanito el que te obliga a tener mal carácter o que nunca escribes tus memorias porque tienes que ir a ver a tu suegra. El auto-conocimiento es un camino lleno de matorrales a despejar por uno mismo (con conejos saltarines incluidos). La bohemia me ha pasado factura impecable esta mañana. Tres parar en el despertador y cara picassiana. Pero es que en el fragor de la noche cualquiera dice que no.

3 comentarios:

david dijo...

de "Loser" res...
Champán Rosa, nou "must read" de cada matí.

tot una "Masterpiece",
felicitats.

salu2, del amigo del niño de los manteles.

Pink pony dijo...

ajajaj, salutacions desde la vida real...Ens veiem aviat! C.

Anónimo dijo...

Y cuantos matorrales mi amol. :)