viernes, 22 de febrero de 2008

La tristeza convertida en espectáculo

Tenía la cabeza como un bombo. Era verdad. Y tenía un mono de olas y ruido bonito del Mediterráneo. Y entonces localicé a mi amiga playera y confidente. Plan nocturno con alevosía. Los relojes jugaron a mi favor. Llegó tarde y sin apenas batería en el móvil. Así tendría más tiempo para observar la gran sopa marina. De repente, como un mini-milagro, apareció en la orilla una melancólica acordeonista que me deleitó durante media hora aproximadamente con cancioncitas lejanas y evocadoras. Me encantó. Parece de peli trasnochada, tv movie tv3sera con lagrimilla final, pero ella bailaba con su pantalón rojo mientras abrazaba el acordeón y le exprimía música. Me retuvo felizmente. Me gustó en el fondo y en la forma. Y a ti seguramente también. El colofón final fue la luna llena sobre el mar, con intervalos discontínuos de nubes oscuras. Un pilla pilla silencioso de ahora aparezco, ahora no.
Y luego decenas de aviones silenciosos que llegaban a la ciudad, impertérritos, ajenos a aquel espectáculo fruto del estrés. Resumen: cuando estés triste y estresado te espero en la playa, cerca de la orilla

3 comentarios:

Mr. Endrinas dijo...

yo venia a ver que decias de la calzotada.

Pink pony dijo...

ya está puesto, cabezón

Anónimo dijo...

tv3era un gran término mujer! buen invento!! Veo que esas madalenas en flor nutren sus neuronas. magnos posts!